Chile
Eficiente trabajo entre la comunidad, Corporación de Cultura y Turismo de Calama y El Abra permitió agilizar el proceso de remoción de graffitis de este Monumento Histórico.
Viernes 26 de Octubre 2012.-
Veintiún metros de consignas escritas con spray fosforescente, un acto vandálico que afectó paredes, el techo y el muro perimetral de la iglesia más antigua de Chile, fueron una verdadera ofensa para la comunidad de Chiu Chiu, que hoy comenzó a ver los trabajos de limpieza a este Monumento Nacional. Un proceso que pudo ser extremadamente largo de no ser por el trabajo conjunto entre la misma comunidad, Minera El Abra y la Corporación de Cultura y Turismo de Calama, que entregó un informe de daños y una propuesta técnica de remoción del graffiti al Consejo de Monumentos Nacionales, que permitió agilizar los trabajos, los que incluso esperan terminar en los próximos 4 días.
“Mantuvimos cerrada la iglesia y ha sido tremendo ver el daño que le hicieron y estamos felices de ver que ya están limpiando las paredes y que ojalá no se vuelva a repetir”, aseguró emocionada Verónica Carrazana, encargada del cuidado del templo. Se trata de un trabajo profesional que está siendo fiscalizado en terreno por el Consejo de Monumentos Nacionales y ejecutado por miembros de la comunidad además de un conservador y un arquitecto, ambos profesionales especializados de la Corporación de Cultura y turismo.
La alianza con Minera El Abra, operada por Freeport McMoRan, fue fundamental para agilizar la remoción de rayados, un proceso en el que la comunidad es protagonista. “En el equipo de trabajo hay 4 agentes comunitarios, elegidos por la asamblea de Chiu Chiu, pues hemos querido que ellos sean parte fundamental de este proceso en el que esperamos recuperar este Monumento Nacional y abrirlo al público lo antes posible”, aseguró Yuri Rojo, Gerente de Comunicaciones y Asuntos Públicos de la empresa.
También explicó que esta es la primera etapa de un proceso de sensibilización sobre el cuidado del templo a nivel comunitario y turístico y mejora en la señalética, medidas con las que esperan un mayor resguardo de la iglesia más antigua de Chile. Este será un trabajo previo a la restauración del edificio patrimonial, que proyectan ocurra en el corto plazo, tal como lo explicó René Huerta, director de Patrimonio de la Corporación de Cultura y Turismo y coordinador de las obras de retiro de los rayados. “A partir de este acto de vandalismo, estamos retomando un proyecto de restauración de la iglesia que está detenido desde el 2009, pero que hoy queremos reactivar, pues tenemos los fondos de gobierno aprobados y creemos que es necesario concretarlo”.
Aún está pendiente la investigación que realiza la Brigada de Delitos Contra el Patrimonio y el Medioambiente de la PDI, que busca determinar los responsables de este acto delictual que afectó a la iglesia y cuyas penas pueden ir desde multas hasta una condena cumplida con cárcel.
Portal Minero