Chile
En huerto escolar aprenderán de la tierra, cultivando sus propios alimentos
Miércoles 05 de Septiembre de 2012.- La fronteriza localidad de Ollagüe, conocida por sus condiciones climáticas extremas y por sobre todo su tradición agrícola, recibió un importante aporte que de seguro, dará nuevos aires a esta actividad. Se trata de la reapertura del invernadero del Jardín Infantil Mi Banderita Chilena.
Con nuevos instrumentos y talleres orientados a los niños del jardín, así como a sus padres y a los demás integrantes de la comunidad, la iniciativa busca inculcar en las futuras generaciones la tradición de cultivar la tierra, traspasada de mano en mano desde generaciones ancestrales, por los pueblos indígenas.
El proyecto que hace posible este Huerto Escolar que se concretó durante los primeros días de septiembre, cuenta con el apoyo de Minera El Abra, operada por Freeport McMoRan, quien en conjunto con Proloa, idearon y ejecutaron la iniciativa.
Según Yuri Rojo, gerente de Comunicaciones de la empresa patrocinadora, la entrega de este invernadero se transforma en una instancia que “busca fomentar la educación ambiental en los niños desde los primeros años, que aprendan a cultivar la tierra y a cuidarla tal como se hacía antaño, todo esto de la mano de sus padres”.
Precisamente la finalidad no sólo es enseñar a cultivar, sino resaltar valores y la relación con el entorno e incorporar en esta enseñanza a los padres, así lo comentó Víctor García, encargado de Comunicaciones de Fundación Integra. “La familia es el primer agente educativo en las actividades diarias del jardín infantil y la idea es hacerlos participar, en esta etapa para que ellos a su vez, puedan traspasar sus propios conocimientos del tema, generando un círculo virtuoso de aprendizaje”.
Al mismo tiempo, Alexandra Marín, gerente general de la Corporación Proloa, aborda otra arista importante del proyecto, la que apunta al desarrollo alimenticio de los niños. “Este proyecto también tiene como objetivo mejorar y fomentar la alimentación saludable de los niños del jardín infantil, siendo el mecanismo de trabajo la realización de talleres y capacitaciones para apoderados y profesores, generando así un compromiso que esté arraigado a la familia y al colegio”.
Los niños y sus padres tendrán a su disposición, talleres de preparación del suelo, compostaje, elaboración de almácigos, entre otros.
Finalmente, una vez que las frutas y verduras sean cosechadas, éstas serán parte integral de la dieta de los menores, cerrando así el ciclo de aprendizaje en el Huerto Familiar.
Portal Minero