GERDAU alerta que en Aduanas no se verifica certificación del acero que entra al mercado nacional

Chile

Gerente general de la acerera, Ítalo Ozzano, sostuvo que es urgente generar un reglamento para el control de las importaciones en ese servicio, que permita, entre otras cosas, “asegurar el cumplimiento de las normas técnicas y empoderar a sus funcionarios”.

Jueves 28 de Julio de 2016.- La compleja situación de la industria del acero en Chile por la falta de regulaciones al ingreso de productos importados al país que no cumplen con las normas y rotulaciones nacionales, denunció el gerente general de Gerdau, Ítalo Ozzano. “En Aduanas no se verifican ni solicitan los documentos que aseguren una estricta certificación de los productos provenientes del extranjero, lo que está afectando a la seguridad y a la calidad”, acusó.

Ozzano se encuentra participando de la duodécima versión del Congreso Nacional del Instituto Chileno del Acero, que se desarrolla en Viña del Mar entre los días 28 y 29 de julio, y que reúne a los principales actores de la industria para debatir en torno a la actual situación y sus perspectivas a futuro.

En ese contexto, Ozzano destacó la participación en el evento del jefe del Departamento de Fiscalización en Línea de Aduanas, Carlos Escuderos, para que entregue respuestas que hagan más efectiva la fiscalización de los productos de acero que se internan al país. “En Chile a la industria local se le exige una estricta certificación de calidad de los productos, pero ello no es replicado a los materiales importados. Por eso en la Aduana debe exigirse la certificación de cumplimiento de la norma y verificar que el cargamento sea el que se ensayó, además de controlar la radiación”, acotó.

El gerente general de GERDAU sostuvo que es urgente generar un reglamento para el control de las importaciones de acero en Aduanas, que permita asegurar el cumplimiento de las normas técnicas; empoderar a los funcionarios de dicho servicio; apoyar la emisión del Decreto de Rotulado de Barras de Acero; potenciar políticas de eficiencia energética a nivel industrial, y estudiar beneficios tributarios escalonados para empresas que generen su propia energía.

Recientemente, el ejecutivo se reunió con la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados donde dio a conocer esta y otras situaciones dispares que están afectando a la industria del acero nacional, y que a nivel global están provocando serias distorsiones en los mercados mundiales.  “La industria china, por ejemplo, cuenta con apoyo financiero del Estado, tiene condonaciones de deuda y créditos preferenciales. En Chile los costos energéticos son mayores y se deben respetar reglas medioambientales que representan un mayor costo para las industrias”, afirmó.

“Los vacíos regulatorios –indicó- nos están impactando fuertemente debido a que no puede ser considerada China como una economía de mercado. Son muchos los países de la Región que están por este predicamento debido a que esas empresas son estatales y no se rigen por las reglas propias del mercado”.

CONTROLES MÁS ESTRICTOS EN UN PAÍS SÍSMICO

Por su parte, el director del ICHA, Jorge Manríquez,  señaló que el instituto ha denunciado a las autoridades  el ingreso de productos de acero que no cumplen las normas técnicas.  “La seguridad de nuestro país empieza con los controles que las aduanas ponen a un producto que ingresa a territorio nacional. Chile es un país sometido a sismos de gran magnitud, y nuestra seguridad no sólo depende de una excelente ingeniería, sino también de excelentes materiales, como el acero. El país debe tener reglamentos actualizados y controles más estrictos. Lamentablemente, no basta con las autorregulaciones, por lo que propugnamos que la autoridad regule. La fiscalización en la aduana ayudará a contar con mejores calidades del acero y mayor seguridad país”.

Sobre las tendencias del mercado del acero a más largo plazo, Manríquez  señaló que “para enfrentar el desafío de ser desarrollados necesitamos mucha infraestructura, resolver problemas de productividad país y apoyar el éxito de otras industrias claves, como la minería o la agricultura. Eso lo lograremos con el acero, combinando otras tecnologías, como la interconexión total de las cosas con las personas, que son nuevos desafíos para la industria e ingeniería locales”.